La geografía histórica no es una rama de la geografía física o la geografía humana, sino que es la geografía del pasado con sus aspectos naturales y humanos, lo que significa que no se limita en su estudio a las condiciones naturales del pasado solamente, sino que se preocupa con el estudio de la actividad humana también.
La geografía histórica es la rama de la geografía que estudia las formas en que los fenómenos geográficos han cambiado a lo largo del tiempo. Es una disciplina sintetizadora que comparte similitudes tanto tópicas como metodológicas con la historia, la antropología, la ecología, la geología, los estudios ambientales, los estudios literarios y otros campos. La geografía histórica es a menudo un componente importante de los planes de estudios escolares y universitarios en geografía y estudios sociales. La investigación actual en geografía histórica está siendo realizada por académicos en más de cuarenta países.
La geografía histórica se ocupa de la lingüística. A través del análisis lingüístico, el estudiante de geografía histórica es capaz de identificar a los humanos en diferentes períodos históricos, ya que el lenguaje es un medio para preservar la civilización y transmitirla de una generación a otra. No cabe duda de que existe una estrecha relación entre la geografía histórica y la historia.